Un golpe de mar

Cuando se ha vivido toda la vida a pie de mar y te ves obligado por las circunstancias a alejarte de él, te das cuenta , de repente ,de la importancia que tiene en tu vida, pues le extrañas como si fuera una persona real. Su olor, su sabor en todo lo que comes, el saberlo ahí, pareciéndote que está solo para ti, se te antoja ,ahora , al saberlo lejos, en sufrimiento y nostalgia de una tierra ,que nació , embriagada de mar.

Porque qué otra cosa es el mar que nos rodea sino apapegamiento generacional de fenicios ,griegos y romanos a estas costas que nos trajeron cultura ,sangre y evolución en las mismas ánforas ,qué otra cosa fueron sino transporte de nuestra cultura y nuestra idiosincrasia a otras tierras , esas galeras que llegaron a América a través de un peligroso mar

Los que han pasado toda su vida ,sin moverse del sitio en el que nacieron y lo hicieron con la suerte, de ver hollar día a día la arena de la playa con la planta de sus pies, no saben de sitios lejanos donde la tierra se confunde con mas tierra y hasta el horizonte que se pierde en los confines , no es azul de mar , preñado de violeta cielo, sino gris de tierra, sembrado de azul cielo. Ellos nunca sabrán lo que es la lejanía de mar ,nunca creerán que los marinos mas avezados ,aquellos que mas ama el mar, lo extrañan hasta cuando está cerca, porque quieren surcar con él sus barcos, quieren perderse en sus aguas y extraer de ellas el botín que con tanto sacrificio ganaron

Los marineros que perecieron en el Nueva Pepita Aurora ,sabrían bien de lo que les hablo , porque ellos como todos los que hacen de la mar su vida ,sufren y velan por ella, pero también es su sustento y la base de su futuro.

Por eso no dudaron en pedir trabajo a gritos manifestándose por las calles, querían volver al mar ,a ese ingrato mar que les ha devorado en sus amplias entrañas, no de madre, sino de madrastra

Fue su barco el primero en salir a faenar, porque los barbateños son gente trabajadora en extremo, gente de mar y para la mar.

Tal vez por eso la mar les quiere para ella y no quiere entender , como novia celosa que es de sus marineros , que las familia quieren recuperarlos ,para poderlos llorar en paz

Mi abuelo que era hombre enamorado del mar ,decía que la mar era señora, pero también de una voracidad temible ,porque nunca se daba cuenta del poder que tenía , ni del daño que podía hacer a aquellos mas amaba.

Los marineros que han vuelto , no podrán olvidar a los que se quedaron para compartir con el mar las mejores pescas y los mas intensos viajes, aquellos para los que ya el tiempo no tendrá fin , porque no envejecerán jamás.

La mar escoge, como señora que es, de sus costas y de sus olas ,los mejores marineros para ella ,”son míos”,parece que dice,”los meceré por siempre entre mis azules aguas ,arrullaré sus sueños y no dejaré silbar al viento ,por siempre entre mis brazos, para sentirme por ellos por ellos abrazada”.

Dicen que fue un golpe de mar el que truncó sus destinos, pero el mar sabe, desde sus azules aguas , que los valientes, aquellos a los que segó la vida ,duermen un sueño tranquilo ,sin miedos ,ni sobresaltos, mecidos por las mareas ,con cunas de arena blanca.